viernes, 22 de febrero de 2013

¿Un amigo para el fin del mundo?


El canal INFINITO tiene razón. La realidad supera la ficción. Pero hay situaciones que hemos visto tantas veces en películas, libros y en la televisión que las acomodamos en el estante de "ficción" y olvidamos que la ficción surge de la realidad, ya que en esa realidad es donde viven y han vivido siempre las mentes creadoras.

Así que cuando cae un meteorito en Rusia nos sorprende ver lo parecido que resulta a las películas apocalípticas, pero lo cierto es que las películas surgieron de una posibilidad verdadera, y la caída del meteoro, su apariencia en el cielo, el sonido de la explosión y las consecuencias de la onda de choque están fundamentadas en la realidad.
Pero hay otros aspectos de la ficción que entran en la categoría de manipulación, heroísmo fantástico y patriotismo, en especial a lo que se refiere a las películas gringas donde el presidente siempre es el héroe, noble, valiente y preocupado por los ciudadanos. Tan preocupado que siempre les avisa que el mundo se va a acabar. ¿Se han puesto a pensar que pasaría en caso de que detecten que un meteoro acabará con la vida en la tierra? Yo sí, y siempre he estado convencida que NO NOS AVISARÍAN.
Y comprobé mi teoría hace unos días.

Nos dijeron que un meteoro pasaría cerca de la tierra y no sería ningún peligro, pero ¡oh sorpresa! un gran fragmento cayó en Rusia y parece que otro pequeño en California. Según dijeron algunos "eran hechos aislados" pero es obvio que no. No es como si todos los días cayeran meteoritos causando destrozos.
A como yo lo veo, sabían el riesgo que había, sabían que se fragmentaría, pero decidieron no decir nada por dos poderosas razones:
a) No había nada que hacer para evitarlo.
b) Evitar pánico en la gente.

Así que podemos estar seguros que si estamos destinados a morir por un evento de esta naturaleza, no tendremos tiempo ni de despedirnos de nuestros seres queridos.

Hace algunas semanas vi una muy buena película: Buscando un amigo para el fin del mundo. Es diferente a las típicas películas sobre el tema, no hay persecuciones, héroes, ni llega Bruce Willis a salvar al planeta. Simplemente un meteoro se estrellará, y se le ha avisado al mundo entero que en algunas semanas moriremos todos.
Es una premisa muy interesante que me dejó reflexionando varios días. ¿Qué haría yo en ese caso? En el filme vemos a muchas personas que siguen con su rutina, como ir al trabajo. Tal vez por negación, como un mecanismo de defensa para la mente en el entendido de que si sigues haciendo lo mismo, es que todo está bien y todo estará bien.

¿Qué cosas vale la pena hacer cuando no existe futuro; cuando no habrá ni siquiera un planeta con generaciones venideras a quienes dejarles algún legado?
 
¿Ustedes que harían? ¿Viajar a los lugares que siempre quisieron conocer? ¿entrar a robar un supermercado? ¿romper todas las cosas de vidrio que tengan en su casa como catarsis? ¿comer hasta reventar todo lo que se les antoje y que hace daño? ¿ensuciarlo todo (como brincar en los blancos sillones con zapatos llenos de lodo), porque, total, ya nada importa más? ¿seguir duchándose todos los días, o pasar sus últimos días mugrosos? ¿seguir con la rutina para creer que todo está en orden?
¿Seguirían odiando a quienes odian? ¿Seguirían peleando con quien pelean todo el tiempo?

¿o simplemente pasarían el mayor tiempo posible con la gente que aman?

Yo haría esto último. Me visualizo en esa situación y de pronto nada más tiene importancia. No importan los lugares que conocer, por muy hermosos que sean, no importa la comida, ni la catarsis, y por supuesto el trabajo tampoco. Lo único que importa es el amor. Es compartir. Es abrazar a quienes amas y decirles cuanto los quieres y cuanto lamentas no poder estar más tiempo con ellos porque nuestro tiempo en la tierra se acabó.

Creo que la mayoría de la gente haría lo mismo que yo. Y lo extraño es que, si sabemos en el fondo que en verdad el amor es lo único que importa, que es lo único que realmente vale la pena y lo único que alimenta nuestra alma, perdamos tanto tiempo de nuestra vida en cosas tan banales.

¿Cuántas de nuestras actividades cotidianas se enfocan en vivir el HOY, y cuántas a vivir el mañana, un mañana que tal vez nunca llegue? Porque como dicen el libro de Marcela Serrano, Diez Mujeres:

-No importa el pasado, ya sucedió. No existe el futuro. Brindo por lo único que en verdad poseemos: el presente.


Arrivederci